jueves, 17 de junio de 2010

God Hates us All

Antes que nada, aclarar a los profanos en el idioma de Shackespeare que el titulo traducido significa, Dios nos odia a todos.

Es cierto gente, si hay un tio hay arriba vigilandonos a todos seguramente que se este descojonando insaciablemente de nosotros, y parece que ami me tiene especial cariño. Todo tiene una explicación, los detalles los dejare para mis allegados si vosotros mis acerrimos lectores (que sois un gran número), tan solo deciros que la cosa ha acabado conmigo arreglado para salir y tirado en la hierba de un paseo.

Mientras fumaba un cigarro y dejaba que R.E.M., Alkaline Trio y algo de Radiohead me regalaran los oidos, (porcierto quien no conozca dichos grupos puede darse ahora mismo por hereje), no pudieron evitar pasar pensamientos por mi cabeza como sacudidas, com rayos, rápidos y fugaces, junto al fantasma de la persona con la que deseaba pasar aquel mal trago, tan solo un fantasma, tan cerca y a la vez tan lejos.

Probablemente si ese ser omnipotente existiera, se estaría partiendo a carcajadas de mi, pero que le vamos a hacer, la vida es dura, no puedo parar de pensar en lo ironico que es que mientras escribo estas líneas, suena por mis altavoces Losing my Religion (del grupo R.E.M.)

Creo que voy a ver una peli.
Att: El hombre que se va a ver una pelicula

jueves, 3 de junio de 2010

Donde quedo Coltrane

Hoy y sin comprender realmente la razón de porque volví a escuchar un par de canciones de aquel genio del Jazz de antaño. No pudo este sino traerme recuerdos de un pasado turbio, un pasado bañado en las agrias mieles de la tristeza de aún sabiendo que aquellos ni por asomo fueron tiempos mejores, querer volver a ellos, como si aún existieran más alla del recuerdo.

Como todo lo agrio en mi vida, esto acaba y comienza con una mujer, aquellos eran otros tiempos, tiempos más simples y desenfadados en los que solía disfrutar de la compañia de buenos amigos enchufados a una consola, o quiza haciendo locuras tales como gravar videos irreverentes de cualquier parida esporadica que saliera de nuestros cerebros. En aquellos felices tiempos conoci a una persona que realmente me fascinaba, disfrutando de dias de playa y piscina a principios de un verano que podría parecer del todo menos sombrio en aquel momento.

Soliamos hablar durante horas y reirnos mutuamente de nuestras paridas y desfases varios, a esta persona le revele todo lo que era, en aquel momento, no me espere realmente que me llegase a gustar aunque gozaba de su compañia, pero fue pasando, esporádicamente hasta darme cuenta mientras escuchaba la canción de Alabama (una de mis antiguas favoritas de Coltrane), tumbado placidamente en la cama de mi habitación.

Luego hubo un beso y tras ello la nada, la nada que causaba una despedida, por si fuera peor, una despedida de excusas baratas, de las cuales reí de dolor de camino a mi casa.
Intente dormir aquella noche pero me fue imposible, un ya más apagado Coltrane me ayudo a quedarme tranquilo, vaciar mi mente y mis pensamientos en la medida de lo poco posible.

Luego se sucedió lo que realmente me llegó a doler, resulta que por causas que aquí no contaré, en aquel proceso perdí a un gran amigo, que digo, un hermano, una genial persona de la cual me distancie de malas maneras. Nos volvimos a reconciliar, pero no volvió a ser lo mismo.

Me refugie en el alcohol y las risas forzadas de aquellas hogueras, dejaba que aquel nectar pensara por mi, deje el piloto automático, mientras sufria las inquisidoras y a la vez burlescas miradas de la susodicha mujer y sus amigas, acabé pagando el precio de mi propia estupidez con una resaca de mil diablos, aunque por lo menos no perdí una zapatilla.

Al final no resulto no ser un mal verano, paso grandes momentos, diferentes a los que planee en un principio, pero buenas memorias tambien inundadas en alcohol, pero diferentes de las visiones esperpenticas de antaño, eran visiones de felicidad y de gozo, y aquello me bastó y me sigue siendo suficiente.

Al final no puedo evitar pensar en aquel yo pasado como un completo idiota integral, un prototipo de persona que no estuvo a la altura y de la que ahora simplemente me rió, tan solo era un capullo que hizo una montaña de un grano de arena, en definitiva, madure.

Ahora mientras escribo estas lineas no puedo pensar que en cierta manera hecho de menos a ese idiota, y sobre todo, hecho de menos aquellas grandes melodias de Coltrane que ahora suenan apagadas, como vestigios del pasado.
Ojala hubiera sido diferente.

Att:Antiguo fan de Coltrane.